domingo, 1 de noviembre de 2015

¿Nos conocemos?

  
  Acabamos atrapados en la idea que tenemos de nosotros mismos. No nos permitimos jugar a ser nada más que la primera persona del singular. Sé que salirnos del 'yo' es aterrador; y aquí, más que nunca, priorizamos lo malo conocido sobre lo bueno por conocer. 


  Pero aquellos que se han atrevido saben lo liberador que resulta pisar fuera del tiesto, salir del salón de lo conocido e inspeccionar las demás habitaciones que conforman nuestra personalidad. Esas habitaciones que un día cerraste a cal y canto para que nadie nunca pudiese verlas, y aquellas que no visitas desde que jugar a imaginar historias dejó de interesarte. Seamos exploradores de nuestra personalidad. Coge el látigo a lo Indiana Jones que se avecinan curvas pero, recuerda, tú no andas buscando nada que este perdido, tu deambulas para conocerte mejor a ti mismo.


  No te confundas, no te digo que renuncies a tu esencia, te digo que te asegures de que ese es tu perfume. Que no porque te guste el olor de las rosas tienes que renunciar a las hortensias. Te aconsejo que descubras más de tus facetas, que cuando te mires al espejo tardes un poquito en reconocerte porque veas una cara nueva a la que antes no te atrevías a mirar a los ojos. No te encasilles (tranquilo, la sociedad se encargará de eso) tu trabajo es conservar ese ápice de locura para querer salirte del molde.
...............

No hay comentarios:

Publicar un comentario