Oxford.

  Este fin de semana el destino elegido para salir de Londres fue Oxford, ciudad universitaria por antonomasia.

  Oxford impresiona por su arquitectura, a la que el poeta Matthew Arnold hizo referencia en la siguiente frase "la ciudad de las agujas de ensueño" debido a la cantidad de agujas que coronan los edificios de esta ciudad.

  Pero según mi opinión, el encanto de la ciudad reside en las historias, a caballo entre la realidad y la ficción, que se cuentan de sus privilegiados estudiantes. 

  Como por ejemplo la de un selecto club al que solo podían acceder los hijos de renombradas familias inglesas y cuyas extravagantes actividades dejaban claro su elevado estatus social. Las reuniones de esta asociación consistían en ir a pubs y provocar destrozos de, digamos, 5.000 libras para luego dejar 15.000 de propina en efectivo encima de la mesa.

  Cuando escuché esta historia me vino a la mente la película "The Riot Club", que cuenta la historia de cómo a los miembros de este club una de esas cenas se les va de las manos.

"I wonder anybody does anything at Oxford but dream and remember"

William Butler Yeats.

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Link:

· Trailer "The riot club" (inglés): https://www.youtube.com/watch?v=pZwv6h-LhTw